Meses de nada realmente, porque todo este tiempo no te necesité ni tampoco te extrañé. Pero llegó un punto en el que me hiciste falta, y que tu ausencia me hizo pensar que rompí mi promesa de no volverte a lastimar. Si lo considero, sí la rompí, y me arrepiento de haberlo hecho... Hay tanto de lo que me arrepiento. Traté de arreglar todo lo malo que hice, pero ese ser que tanto odio, áquel que está dentro de mí y al que le encanta jugar conmigo y con los demás; quiso volverme a empujar a lo de siempre. Tal vez fue mi error dejarme convencer. Ahora que trato de recordar, ni siquiera sé porque lo hice y porque tengo la sensación de que lo volvería a hacer de nuevo. Nada está bien. No es justo que me perdones a cada paso, por todas las idioteces que cometo. Tiempo atrás creía que yo era un simple victima, una persona que se había cruzado en tu camino, una a la cual te gustaba lastimar y herir a cada instante. A veces reconocer un error no es tan difícil como tratar de repararlo todo. Sé que tengo mil personalidades y que tuviste que despertar a la peor de ella, ésa que supo jugar con vos y clavarte las garras miles de veces. Éramos tan parecidos, o eso solía creer. Pero no sos del todo fuerte, y eso era tan evidente. Sé que tengo tantas cosas malas dentro de mí; pero aun no sé como arrancarlas. Al menos ahora ya no estoy como en aquella época, cuando no podía ni moverme y el cuerpo dolía tanto. Sollozar todo el día parecía una delicia en esos días de amargura. Aunque haya sido algo compartido, no es un consuelo, es sólo un nuevo cargo de conciencia. El tiempo corrió muy rápido, y en unos meses se van a hacer dos años. No sé cómo tomar el hecho de que los momentos de dolor no pasaban más, y los de sosiego parecían no durar ni dos segundos. Debo reconocer que extraño los buenos momentos. Porque a pesar de todo, hubieron situaciones que son memorables. Quisiera sentir todo eso que sentí y sé que no volveré a sentir. Esas sensaciones de emoción y de alegría por saber que lo que tenía era seguro y hermoso. Me confortaba pensar que no había nadie más. Pero todo cambió tan pronto por la locura de ambos (mayormente la mía) Creo que jamás conoceré a alguien tan diferente y a la vez igual a mí. Es complicado de entender (hasta a mí me cuesta).
Fue bueno y malo, todo a su debido tiempo.
Fue bueno y malo, todo a su debido tiempo.
1 comentario:
exelente blog!!!!!!!
de variados temas y muy completos
te deseo la mejor de las suerte
y sigue asi con tu trabajo en el blog
nos vemos!!!!!!!!!!!
suerte
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